La alemana Angelique Kerber, número uno del mundo y defensora del título, se abrió paso a los octavos de final del Abierto de Australia con una victoria ante la checa Kristyna Pliskova (58), por 6-0 y 6-4.
La quinta jornada de este Grand Slam comenzó fría (17 grados) y húmeda por las lluvias que cayeron en la noche, Pero Kerber calentó el ambiente en la Rod Laver Arena arrollando en el comienzo y endosando un parcial de 8-0 a la hermana gemela de Karolina en solo 30 minutos.
"No ha sido fácil, es una gran rival, golpea muy fuerte y saca muy bien y he tenido que estar muy atenta hasta el último punto, porque podía pasar cualquier cosa", dijo Kerber, que este jueves cumplió 29 años.
Su rival será la estadounidense Coco Vandeweghe, 35 del mundo, que superó a la canadiense Eugenie Bouchard, semifinalista en 2014, por 6-4, 3-6 y 7-5, después de dos horas y 22 minutos.
El encuentro fue un disparate de errores no forzados, 70 entre las dos y se le escapó a Bouchard, que tras remontar el primer set estuvo luego con rotura arriba en el definitivo.
La clave fue el noveno juego del set final, interminable, de casi 13 minutos, plagado de fallos en ambos bandos, que Vandeweghe sacó adelante para imponerse finalmente y firmar su mejor actuación en Melbourne.
Vandeweghe, que forma pareja en el dobles con la suiza Martina Hingins, festejó su victoria de forma ostensible, con un grito atronador en la Rod Laver Arena, algo que no gustó a Bouchard, y el saludo entre ambas al acabar el encuentro fue muy frío.
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