BOGOTÁ. Las autoridades colombianas capturaron al exgobernador del departamento de Santander Hugo Aguilar, a su exposa Mónica María Barrera Carreño y un presunto testaferro por lavado de activos y enriquecimiento ilícito, informó ayer la Fiscalía General de la Nación.
Aguilar, quien llegó al rango de coronel en la Policía colombiana, encabezó la operación en la que murió el narcotraficante Pablo Escobar, jefe del desarticulado cartel de la cocaína de Medellín, y en las elecciones de 2003, fue elegido gobernador de Santander.
El oficial dirigió el asalto en el que fue abatido a tiros, el 2 de diciembre de 1993, el hasta entonces considerado uno de los hombres más ricos y buscados del mundo.
Escobar murió en uno de sus múltiples escondites, una casa en un barrio popular de Medellín, en una operación en la que participaron agentes del Departamento Estadounidense Antidrogas (DEA).
Según documentos de la época, el entonces coronel hizo uno de los disparos que acabaron con la vida del mafioso y alcanzó la Gobernación de Santander con 284.643 votos liderando el movimiento Convergencia Ciudadana.
Aguilar fue condenado el 14 de agosto de 2013 por sus vínculos con el “Bloque Central Bolívar” de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), que operó en Santander (noreste), y le fue impuesta una pena de nueve años de cárcel y una cuantiosa multa en favor de las víctimas de 6.300 millones de pesos al momento del fallo (unos 2,1 millones de dólares).
Tras obtener la libertad condicional en 2015, el exgobernador dijo que no podía pagar esa multa porque no tenía dinero, pero al mismo tiempo manejaba un Porsche.
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