Entre el mal olor y la contaminación generada por las aguas
residuales que brotan de una alcantarilla obstruida viven los residentes en la
calle José de Jesús Ravelo, en el sector Villa Juana.
Tres meses han pasado desde que la CAASD prometió solucionar
el problema en algunas semanas. Nuesyra compañera Rosalba Escalante estuvo en
lugar y nos cuenta más.
Un río de putrefactas aguas que emanan de los apartamentos
en el edificio 54, ubicado en la calle José de Jesús Ravelo de Villa Juana, en
el Distrito Nacional, cubre las aceras y contenes de esa vía, producto de la
obstrucción de la alcantarilla.
El mal olor que se desprende de estas aguas negras obliga a
los moradores a vivir como presos en propias casas, donde los niños no pueden
ni salir a jugar.
A fin de paliar la situación los vecinos constituyeron un
drenaje improvisado, inconscientes de que en cualquier momento colapsará.
Aseguran los residentes en el edificio 54 de Villa Juana,
que han pasado tres meses desde que acudieron a la Corporación del Acueducto y
Alcantarillado de Santo Domingo, donde se les dijo que en algunas semanas les
resolverían el problema, pero que primero debían subsanar una obstrucción
general del alcantarillado en Villas Agrícolas, sector con el colindan.
De no asistir las autoridades en su pronto auxilio, los
moradores en la zona están dispuestos a lanzarse a las calles a protestar.
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